...de pronto descubro que no es la oscuridad la que me está llamando

Nunca he sentido la soledad aún estando con la casa vacía, siempre siento que un par de ojos se ciernen sobre mí,
hablo en voz alta y me consuelo a mi misma...

tal vez no se lo que digo...tal vez siempre está al lado mío...
sin embargo de pronto...di la vuelta y entonces lo vi...

ese entorno siniestro que inunda mi ser y poco a poco lo va consumiendo... mi dualidad...mi cómplice...

doble faceta de quien antes solía ser una... la sombra asecha...

la torpe presa amenazada va directo al abismo...
más no tengo miedo...

de pronto descubro que no es la oscuridad la que me está llamando...

tal vez sea un golpe de esperanza por levantarme de este letargo... equivocados, a veces al pensar que debemos regirnos por un destino marcado, por pautas planteadas...tal vez debemos permitir que nuestra esencia salga a relucir...
y nos demos cuenta que sólo debemos seguir por nuestros deseos por lo que nos hace levantar de esa cama...tal vez deberíamos temer a lo normal.