tus dedos todoterreno provocaban un sueño...

Lo que ayer fué una gran tormenta...hoy es un remanso de paz...
La otra noche...al despedirnos, apagué el celular y cerré los ojos de
de pronto, un calor tibio me hizo girar, estabas justo ahí, ofreciéndome
tus manos...te tomé y me jalaste hacia a ti...enmudecida, sólo atine a seguirte,
vi tu mirada titilante...llena de luz, de paz...amorosamente invitante...
tus manos recorriendome...adueñandose de gran parte del camino,
tus dedos todoterreno provocaban oleadas de placer... tus palabras penetraban
donde no puede llegar la piel...
te sentías amado, trasladándome por tu velludo pecho a la frontera donde
sólo yo anticipo la llegada para prepararte a lo que viene...
tu piel morena contrasta con lo blanco de la mía...
la combinación perfecta entre goce y valentia...
miraba tus ojos agradecida...pese a tu cansancio estabas ahí...
consintiéndome...aquello no hacía sino confirmar el hombre que eres...
entreabrí los labios susurrandote algo mientras arqueaba mi espalda...
no sé que te dije, sólo sé que cuando abrí los ojos vi que soñaba...
sin embargo la humedad de las sábanas me confirma que esa noche
en esa madrugada nos estuvimos amando...