Tal vez mi piel no vuelva a envolver la tuya en humedad...
tal vez no vuelva con mis labios en tu oreja a tu cuerpo estremecer...
tal vez la osadía de amarte haya terminado tempranamente
por una jugada torpe de alguno, o de ambos...
tal vez mi ser calladamente se flagele mientras te recuerde...
El amor que te prodigó este corazón ardiente...
No podrían toparse tus ojos con quien te amaré igual...
no hay quien mezcle tan desafiantes la ternura, el amor, la pasión y
la locura para simplemente hacer que tus noches frías de vuelvan cálidas...
al cerrar los ojos para dormir...y pensar en mí.
No te afanes intentando olvidarme...
tus recuerdos de mí, son para ti como arenas movedizas...
mientras más lo intentes, más te hundirás en ellos.
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